llegar a la casa nueva
vaciar las cajas
decidir un nuevo orden para todo
armar muebles y buscarles su nuevo sitio
Milo y la gata lo han llevado bastante bien por suerte, los dos parecen contentos con la nueva casita
a la mañana siguiente, apenas levantado y contagiado por el espíritu de renovación, Milo dibujó su mueble
y siguiendo el clima de limpieza, se dedicó a limpiar con un nuevo artefacto
con tantas emociones, irse a dormir no era nada tentador y el día se hizo medio largo
No hay comentarios:
Publicar un comentario